jueves, 1 de enero de 2015

Miro adentro y él sigue estando ahí


Sigo alzando mi mirada a los montes y a los cielos, sé que mi socorro siempre viene de Jehová.  Pero no solo miro a lo que me rodea, miro adentro de mi corazón y allá muy adentro de mi ser, sé que aunque mis ojos humanos no lo vean, Dios sigue estando ahí, presto para ayudarme y fortalecerme, para enfrentar cada batalla y para darme de su amor y gracia ilimitada. Y esa convicción me sostiene, porque en él está anclada mi vida.  

(By: Brendaliz Avilés)

 A veces las personas solo necesitan ser amadas. Que las abraces sinceramente y las escuches con atención. Que le brindes una mirada o una s...