domingo, 2 de agosto de 2009

ESPERANDO con POSITIVISMO


Esperando Con Positivismo

“Mas yo esperaré siempre, y te alabaré más y más. Mi boca publicará tu justicia y tus hechos de salvación todo el día, aunque no sé su número”. (Salmos 71:14-15)

Primeramente, quiero animarles a leer este salmo completo en la intimidad de sus hogares. Este es un salmo inspirador que lleva por título “Oración de un Anciano”. Estos versos expresan una petición, un clamor sabio. Una oración que nace desde lo más profundo de un corazón que quiere vivir conforme a la voluntad de Dios. Manifiestan el deseo de un alma que anhela una vida recta y agradable en donde Dios sea el eje que mueva todo en orden y correctamente. Lo escribe un hombre experimentado, que ha caminado mucho por la vida y que habla con propiedad. Habiendo sido su vida un testimonio continuo de lo que es el respaldo y el poder de Dios. Por eso sabe perfectamente lo que está escribiendo y mucho más aún lo que está pidiendo.

En medio de su oración se proclama la grandeza del Señor. Rescaté esos dos versículos porque llamaron mi atención. Porque revelan una espera permanente unida a una seguridad y confianza. También porque este salmo relata las bondades y cuidados de Dios para con David desde su juventud. Y aunque soy joven mi oración al Señor es también parecida a esta. Me gusta porque estos versículos expresan un tipo de espera que no es agobiadora, sino que invita a mientras recibes lo que esperas, alabar. Y alabar no es otra cosa, sino proclamar las grandezas y maravillas del Señor. Es pregonar a viva voz las bondades que él ha tenido para con tu vida. No se conforma con alabar durante un lapso de tiempo determinado, sino que expresa un deseo continuo cuando se utiliza la palabra más y más.

“Más y más” es el lenguaje de aquellos que se sumergen en las aguas del Espíritu de Dios y no se quedan en la orilla. “Más y más” es el término que utilizan aquellos que no son simplemente espectadores, sino que viven la historia que Dios ha trazado para sus vidas. Alabar es sentarte y recordar todas y cada una de las bendiciones que te han sido otorgadas y regocijarte sabiendo que vienen más experiencias sorprendentes de camino. Que seguirás viendo su mano Poderosa fluir con más poder que ayer. Porque con cada nuevo día se desataran más cosas buenas para tu vida si asumes tu posición con paciencia y entusiasmo, sin tratar de desesperarte y siendo perseverante.

Autora: Brendaliz Avilés

 A veces las personas solo necesitan ser amadas. Que las abraces sinceramente y las escuches con atención. Que le brindes una mirada o una s...