“Y los discípulos, viéndole andar sobre
el mar, se turbaron, diciendo: ¡Un fantasma!
Y dieron voces de miedo. Pero en
seguida Jesús les habló, diciendo: ¡Tened ánimo; yo soy, no temáis! (San
Mateo 14:26-27)
El miedo, es ese tipo de sentimiento que
paraliza. El miedo no permite que veamos
las cosas con claridad. Pero para
disipar cualquier temor o incertidumbre está Jehová. Para vencer toda obra del mal con el bien, es
que tienes a Dios. El fantasma y los recuerdos del pasado son confrontados
con el poder de la sangre redentora de Jesucristo. Por tanto, toda oscuridad que pueda estar
rodeándote es vencida por la luz de Cristo.
¡Deposita tus temores en las manos del Señor y tu equipaje se aligerará! Él en cambio te pondrá un manto de valentía
para que sigas marchando en tu transitar por la vida. La mejor forma de combatir el miedo es
enfrentándolo y al enfrentar ese temor, no lo harás solo, Dios va conduciendo
tus pasos, así que no temas.
(By:
Brendaliz Avilés)
Escrito Para: www.brendalizaviles.com y Tú Palabra de Aliento