miércoles, 30 de junio de 2010

CREER AÚN SIN VER NADA


Creer Aún Sin Ver Nada

¡Qué difícil es creer cuando no ves nada! Cuando el camino es incierto y tus recursos escasean. Cuando sientes que se agotan tus fuerzas y tu mente comienza a plantar preguntas de las que no obtienes respuestas. Cuando a tu lado sientes la derrota y la duda carcome tu esperanza.
¡Qué difícil cuando te dan la espalda los que menos imaginabas! Y sientes un dolor tan fuerte en el pecho que te hace sentir que no podrás continuar, que el corazón va a reventar. Y ves las puertas cerradas y no encuentras ninguna ventana. Piensas, ¿dónde está Dios? ¿Qué hace que no te ayuda? Y a tu alrededor todo está en silencio, pero en tu interior los pensamientos e ideas no dejan de hablarte.

Pero no es fe creer cuando todo lo ves. Porque la fe desafía al mundo natural, enfrenta a nuestras dudas y reta a nuestros pensamientos. Porque la fe es superior a lo que sentimos, es aquello de lo que estamos convencidos que sucederá. Porque la fe acompaña a aquellos que no son incrédulos y les demuestra que las cosas pueden llegar a ser posibles.
Por eso, sigue creyendo. No dejes de confiar en Dios. Se necesita valentía para enfrentar los temores y las dudas. Para proclamar que algo sucederá aún cuando las posibilidades parecen poco probables. Pero Dios es experto en romper con estadísticas y en hacer las cosas imposibles, posibles.
¡No desmayes, sigues esforzándote! Y cuando alguien te mire con incredulidad o intentando burlarse, no te intimides, levanta tu cabeza bien alto. Porque este mundo pertenece a aquellos con la suficiente visión de seguir creyendo que algo sucederá aún cuando no ven nada.

Autora: Brendaliz Avilés

Escrito Para:
www.brendalizaviles.com
www.devocionaldiario.com
www.destellodesugloria.org

LA DIFERENCIA ENTRE LAS NIÑAS BERRINCHES Y LAS VERDADERAS MUJERES

Me enviaron esta buena reflexión y verdaderamente está para pensar y reflexionar. La comparto porque sé que será de mucho beneficio para muchas mujeres.

LA DIFERENCIA ENTRE LAS NIÑAS BERRINCHES Y LAS VERDADERAS MUJERES

Las niñas quieren controlar al hombre en sus vidas.
Las mujeres, saben que si el hombre es realmente suyo, no hay necesidad de control. Las niñas te gritan porque no las llamas.
Las mujeres están demasiado ocupadas para darse cuenta que no las has llamado.
Las niñas tienen miedo de estar solas.
Las mujeres lo utilizan como tiempo para su crecimiento personal.
Las niñas ignoran a los buenos hombres.
Las mujeres ignoran a los malos.
Las niñas te hacen que vuelvas a casa.
Las mujeres hacen que quieras volver a casa.
Las niñas dejan su agenda abierta y esperanza que su hombre hable para hacer planes. Las mujeres hacen sus planes y cariñosamente notifican a los hombres para que ellos se integren como mejor les convenga.
Las niñas monopolizan el tiempo de su hombre.
Las mujeres se dan cuenta de que un poco de espacio, hace del tiempo juntos algo más especial.
Las niñas creen que un hombre que llora es débil.
Las mujeres ofrecen su hombro y un pañuelo.
Las niñas lastimadas por un hombre, hacen que todos los hombres paguen por eso.
Las mujeres saben que fue sólo un hombre.
Las niñas se enamoran y persiguen sin descanso.
Las mujeres saben que algunas veces el que tu amas, no te amará y continúan su camino sin rencor.
Las niñas leerán esto y harán una mueca.
Las mujeres lo pasarán a otras mujeres maduras.
En fin, tú decide, niña o mujer.
Y ustedes hombres, ¿andan con una niña o con una mujer?
LOS AÑOS ARRUGAN LA PIEL, PERO RENUNCIAR AL ENTUSIASMO ARRUGA EL ALMA

Desconozco cuál de ellas es la Autora

L.I. Teresita Judith Hernández Garcés (UNAM)
Elimarie Betancourt

Yo sé que me responderás

 ¡Dios mío alzo mis ojos a los cielos!  Solo a ti que eres el único que tiene misericordia de mí y puede ayudarme. A ti que ves aún en lo se...