“Mi Corazón te Espera”
Es una aseveración, una expresión que afirma una decisión. Una decisión a su vez es un compromiso que te
haces a ti mismo y en este caso a otra persona.
Esperar implica tiempo y paciencia.
En un mundo donde todo parecer ser “express”, esperar se nos hace
difícil. Pero resulta que hay cosas
demasiado valiosas en el mundo y que merecen la pena esperar. Tu pareja, la ayuda idónea, la persona que
elegirás para compartir el resto de tu vida es una de las decisiones más
importantes en tu vida. Y nuestras
emociones a veces son engañosas. Es por
esto que el proverbista decía: “Con toda diligencia guarda tu corazón, porque
de él brotan los manantiales de la vida. (Biblia Paralela Proverbios
4:23). La biblia también dice en
Jeremías 17.9 “engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso;
¿quién lo conocerá?
Pero el corazón también es un precioso cofre y tesoro de donde pueden
aflorar las más bellas emociones y sentimientos. Aunque es fuerte y tiene una capacidad
increíble de sobreponerse a fuertes cosas, también es frágil y delicado cual
cristal. El corazón es algo que no le
puedes entregar a cualquiera. Porque
cuando entregas tu corazón, estás entregando de alguna manera tu vida. Cuando entregas tu corazón, estás entregando confianza
e intimidad. Estás intentando dar lo
mejor de ti a otra persona.
Pero para poder amar a otra persona, tienes que comenzar por amarte,
valorarte y respetarte a ti mismo. Ya
sea que estés soltero o que tengas novio(a), tu valor es tan precioso y significativo
que Cristo entregó su vida por ti. Por
tal razón debes primero comprometerte a cuidarte y amarte a ti mismo para que
luego puedas entregar todo ese amor a alguien que lo merezca. A esa persona especial que Dios tiene
señalada para ti. A ese alguien que te
encontrara maravillosamente interesante y que podrá amarte con defectos y
virtudes. A ese alguien que te pueda
conocer y corresponder más allá de lo que otros puedan ver a simple vista. A alguien a quien le gustes, no se avergüence
de expresar que le pareces la persona más hermosa del mundo y que te dé el
valor y el tiempo que necesitas en tu vida sin necesidad de mendigarlo. Alguien que se alinee a los planes
maravillosos que Dios tiene para con tu vida y que juntos puedan complementarse
y cumplir el propósito de Dios en sus vidas.
Pero independientemente de si tienes novio(a) o estás soltero(a). Debes cuidar tu cuerpo, tu corazón, tu alma,
tu mente, tus sentimientos. Cuidarte de
la promiscuidad, de lo que miras, hablas, ves, tocas y escuchas. El asunto de la pureza sexual no es un asunto
pasado de moda y tiene que ver con la integridad y con la santidad. Tiene que ver con quién eres cuándo nadie te
ve. Aunque el mundo dice que está pasado
de moda el asunto de cuidarte y guardarte para tu pareja es importante. Dios desea que cuides ese aspecto de tu
vida. Porque cuando entregas tu cuerpo a
una persona, estás entregando intimidad y también hay una conexión espiritual. Lo que Dios señala como pecado, lo sigue
siendo aunque muchos intenten invalidarlo y decir que no es verdad.
Deseo también decirte que si tienes tu novio(a) y por alguna razón has
caído en la tentación, hoy tienes una nueva oportunidad de volver a hacer un
pacto de amor y cuidarte. Porque cuando
amas desarrollas el fruto de la paciencia.
Porque el amor verdadero, cuida, protege, preserva, respeta, busca el
bien de la persona amada. Por eso mi
corazón te espera es más que una mañana de conferencia donde aprenderás, te
reirás y te divertirás. Mi corazón te
espera es una decisión y un compromiso.
Un pacto con Dios, contigo y con la persona que aún no conoces pero
amarás algún día o con la encontraste y estás planeando hacer tu vida. Es mi deseo que cuando encontremos el amor
podamos exclamar como los versículos expresados en Cantares 5:2: “yo dormía,
pero mi corazón velaba, ¡una voz! ¡Mi
amado(a)toca a la puerta!
Autora: Brendaliz Avilés